Según estudios se ha podido comprobar que el segundo hijo es más difícil de criar que el primero. Y es que, a pesar de que muchas veces al vivir la maternidad o paternidad por primera vez, pensamos que ya estamos preparados para lo que viene, y al parecer no es así.
Cuando preguntan por el más perezoso, por el más problemático, por el más irresponsable, por la oveja negra de la familia, más bien, se suele dirigir la mirada hacia el segundo hijo.
Muchos padres pueden llegar a confiarse con el nacimiento de un segundo hijo, pensando que ya tendrán la situación bajo control y que podrán criarlo sin mayor dificultad como lo hicieron con el primero .
Existen distintos factores que determinan el hecho de que el segundo hijo tiene la probabilidad más alta de ser el caso más difícil de sobrellevar en la familia. Desde la oveja negra, el hijo rebelde, el que no encaja, el que es diferente o como bien se le quiera llamar.
Cabe notar, ahora que un grupo de científicos ha asegurado que “la maldición del segundo hijo” es real, el hecho cobra relevancia y más aún cuando la ratifica el Instituto Tecnológico de Massachusetts.
Adicional, también se cree que esto puede estar relacionado directamente con las personas que consideren los niños ejemplos a seguir. Así como la conducta aprendida en casa, el entorno, y un sinfín de factores más que juegan un papel de gran importancia.
Expertos en el tema señalan que los primeros hijos son los más beneficiarios
Los investigadores han sugerido por un tiempo que los primogénitos obtienen mejores resultados en educación, que tienen coeficientes intelectuales más altos y que pueden ganar mejores salarios, pero este es uno de los primeros estudios relevantes en señalar que los hijos segundos son, de hecho, los alborotadores del grupo.
Se piensa que esta tendencia puede verse mayormente marcada en los hijos varones, pues éstos suelen ser quienes pueden llegar a presentar mayores problemas de conducta. Es así, que también se dice que los primeros hijos en nacer, pueden tener mayores ventajas a diferencia de los hijos menores, tanto en la conducta así como en el desempeño académico.
El motivo:
¿Qué hace que los segundos hijos sean tan diferentes de sus hermanos mayores? Por un lado, Doyle sugiere que los padres están más dedicados a la crianza de los primogénitos, pues no desean cometer errores en una situación que les resulta desconocida.
Cuando el segundo hijo llega, los padres son simplemente menos vigilantes, pues tienen la sensación de que de algún modo ya han superado la prueba, al criar correctamente al primero, entonces se ponen más relajados, y le dan más libertad al segundo.
Ciertos o no, estos estudios llevados a cabo, no cabe duda de que deja de ser un tema bastante interesante. Así que ya lo sabes, si eres padre o madre y estás a punto de tener un segundo hijo, lo ideal es que procures prestarle tanta atención como al primer hijo que ya tuviste.
Fuente: Solterita Online / Un sitio para ti