Para aquellos que son culpados de ser malhumorados, ellos solo cuidan su salud
Estar enojado en el trabajo, en casa e incluso en el transporte puede ser muy bueno y, según las investigaciones de la UNAM, uno puede enojarse a los 30 minutos del día y puede ser beneficioso para nuestra salud.
Cuando nos enojamos, es un estímulo neuroquímico que estimula las ondas cerebrales.
También aumenta la frecuencia cardíaca y respiratoria; y libera dopamina que excita nuestras neuronas y estimula el cerebro.
¡Pero ten cuidado! Enojarnos por más de 30 minutos nos hace mucho daño, ya que nuestro cuerpo libera cortisol, una hormona del estrés que nos hace subir de peso.
Es importante canalizarlas enseguida para no quedarnos con nada guardado o que ronde nuestra mente haciéndonos mucho más daño.