Está hablando sobre el cáncer, y su percepción no es del todo errónea, según la Organización Mundial de la Salud, la segunda causa principal de muerte en el mundo, sobre una de cada seis muertes causadas por esta enfermedad.
Es un problema social y de salud que ha provocado que las escuelas, los laboratorios y las instituciones dediquen recursos y esfuerzos para buscar posibles curas, y tal vez no estamos tan lejos.
A esta inyección se le llama vacuna in situ, no actúa bajo el concepto tradicional de las vacunas, no previene el cáncer, su acción en realidad es terapéutica, trata la enfermedad.
La prueba se realizó en pacientes que sufren linfomas indolentes no Hodgkin y que son resistentes a la terapia estándar y responden negativamente a los métodos de bloqueo.
¿De qué tipo de cáncer se trata?
La vacuna también parece aumentar la efectividad de la inmunoterapia llamada bloqueo del punto de control, un medicamento que intenta prevenir la acción de ciertas proteínas que evitan que el sistema inmune libere los “frenos” que destruyen las células cancerosas, describe el Instituto Nacional del Cáncer.
Esta opción se aplica directamente al tumor y sus resultados son positivos, pero la prueba que utilizó la investigación es demasiado pequeña para realizarla de inmediato, aún se necesitan más pruebas, pero es esperanzador.