Es una ocasión preocupante, y cada mujer tiene una opinión diferente sobre qué es mejor o cuál es el método menos doloroso, recuerde que se trata de experiencias muy diferentes, pero debe recordar y tener en cuenta que lo más importante es Vaya a las consultas del médico con el ginecólogo, para evitar cualquier complicación que pueda surgir en el proceso antes del parto.
No tienes que preocuparte, solo tienes que seguir bien las indicaciones de tu médico especialista y lo más importante disfruta de esta nueva etapa en donde te convertirás en madre.
Hay dos formas de traer un niño al mundo, y estas son; parto natural, el más común en todas las mujeres y cesáreas, que es un procedimiento quirúrgico.
Como mencionamos anteriormente, la experiencia es diferente para cada mujer, algunas encuentran que el parto natural es más doloroso que la cesárea, pero otras encuentran que el proceso quirúrgico es incómodo.
Es cierto que el dolor es cinco o siete veces más intenso después de un parto natural después de tener un hijo a través de una cesárea.
A continuación, le daremos puntos que debe conocer o conocer con el método de cesación.
Molestias: recuerde que este síntoma ocurre en la parte inferior del abdomen, ya que el procedimiento se realizó allí, centrándose en el dolor de la sutura.
Complicaciones: La cesación es difícil para las mujeres que padecen diabetes o tienen sobrepeso, porque la cicatrización es más complicada y lenta, ya que es un inconveniente que dura hasta meses.
El riesgo de complicaciones a veces puede aumentar cuando en este caso la madre ya ha tenido algunas cesáreas previamente, debido al riesgo de adherencia de la vejiga a la sutura. Además, corren el riesgo de mostrar problemas de coagulación, entre otros.
Infección: el dolor puede aumentar demasiado si la herida se infecta o irrita dentro de las 24 horas.
En consecuencia, síntomas como: pus en la sutura, fiebre, exceso de sangre, ombligo rojo, etc.
El parto natural es muy diferente a la cesárea, sí, es doloroso, pero el dolor solo dura un cierto tiempo, dependiendo de cada mujer.
A algunas mujeres les puede parece un dolor insoportable, pero a otras, es un dolor más ligero y liviano a comparación de una cesárea.
El contacto con el niño es inmediato: a diferencia de la cesárea, donde no puede ver a su hijo después de unas horas, dejando a la madre en la incertidumbre.
Recuperación: este proceso es más rápido porque no hay suturas presentes.
No corre el riesgo de infección: evitará el dolor que sufren las mujeres que sufren de infección debido a un procedimiento quirúrgico.
Sangrado en el sangrado: la madre tiene un menor riesgo de sangrado o pérdida de sangre excesiva.
Se puede concluir que el parto natural es menos doloroso que la cesárea, ya que evita una serie de problemas que pueden ocurrir en la sutura.
En el parto natural, el dolor dura solo unos momentos y el niño obtiene una mejor oxigenación cerebral.
De todos modos, después de someterse a un parto natural o una cesárea, lo doloroso que ha sido, no se compara con el verdadero amor que siente una madre cuando su bebé en su regazo se convierte en un vínculo de amor ininterrumpido entre madre e hijo como lo es para la vida.