Ni la joven madre ni su esposo pudieron conseguir una silla prioritaria para ella y el bebé.
Una madre inglesa narró que tuvo que amamantar a su pequeño hijo en el suelo de un vagón de tren cuando ni ella ni su esposo pudieron conseguir una silla, pues ningún pasajero cedió el espacio, según reseñó un.
Aseguró que aunque había al menos 50 pasajeros en su viaje de Shropshire a Ludlow nadie quiso darles un asiento, por lo que tuvo que turnarse con su pareja para cuidar de Chester.
Durante el recorrido, la madre de 22 años tuvo que sentarse en el piso del automóvil para que su hijo de un año pudiera comer, ya que ni siquiera los asientos prioritarios estaban disponibles en un viaje de media hora.
“Cuando me senté en el piso, hubo personas que fueron al baño y vieron que estaba amamantando, pero nadie nos ofreció un asiento”, dijo Sophie.
De acuerdo con el relato de la pareja, que fue reseñado por varios medios británicos, las personas pasaban junto a ella ignorándola “como si no quisieran llamar demasiado la atención”.
“Obviamente preferiría no sentarme en el piso sucio de un tren en movimiento amamantando, no era el mejor lugar, pero realmente no tenía muchas opciones”, expresó la joven.
El motivo del viaje era pasar un tiempo en familia y como ni Sophie ni su esposo Rob Moore conducían, ambos decidieron que debían utilizar el tren, sin pensar que su mala experiencia se daría a conocer.