Esta sensación cuando el médico revela que está embarazada es una de las mejores noticias y un momento maravilloso que puede sucederle a una mujer, especialmente si ha tenido mucho tiempo tratando de concebir o es un sueño para ella.
Donna estaba emocionada, pasó todo el embarazo esperando ese precioso momento, y cuando finalmente llegó el día, nunca imaginó que algo así podría suceder.
En 1977, dio a luz a dos hermosas bebè, una muy diferente de la otra, Lucy, llamó a ese bebé con piel blanca, ojos azules y cabello rojizo, mientras que el segundo bebé se llamaba María, era de piel oscura, sus ojos eran marrones. y su cabello era oscuro y rizado.
Todos en el hospital, amigos y familiares no explicaron cómo podían ser gemelos, porque parecían no tener similitudes.
Los familiares no entendieron la diferencia entre los dos, hasta que Donna quedó atónita y confundida, sin embargo, esto tenía una explicación.
Donna Aylmer es de ascendencia británica y jamaicana, y el padre de las niñas es británico, aunque las pequeñas no son gemelas, a diferencia de las gemelas, las gemelas son de dos óvulos fecundados por espermatozoides diferentes.
En el aspecto genético, la madre tiene ascendencia con características oscuras y claras, esta mezcla de genes hizo que uno de los gemelos naciera con piel blanca, mientras que el otro nació con piel oscura.
La diferencia entre los dos, principalmente el color de su piel, generó que las gemelas durante el crecimiento sufrieran provocaciones y críticas sobre el color y la relación entre las hermanas, ya que Lucy fue llamada “fantasma” o “gasparina” debido a la piel extremadamente blanca que fue adoptada.
Por otro lado, María también sufría por no ser como su hermana, porque todas las noches la niña lloraba desconsolada por no tener el cabello rojo de su hermana.
Las gemelas han crecido y ahora tienen 21 años, y aunque siguen siendo diferentes, el vínculo y el amor entre hermanas las unen por igual.
Al igual que su apariencia física, su personalidad también es completamente diferente, Lucy ama el arte y es muy reservada con sus cosas, mientras que María es más extrovertida y apasionada por el mundo de la moda.
Ellas se sienten orgullosas de lo que son, han aprendido a valorarse y amarse según sus diferencias y son las mejores amigas.
María sigue admirando a su hermana Lucy, y espera que cuando tenga hijos, al menos una se parezca a su hermana y mejor amiga Lucy.